Con las ruinas del socialismo y el glamour de los almendrones americanos de los años cincuenta como escenario morboso y especial para estrellas internacionales de la moda, la música, el cine y la televisión, la dictadura ha conseguido que la vida real de los cubanos, la represión, las golpizas, la escasez, la marginación y las duras cifras de la emigración pasen a un segundo plano en los principales medios de prensa de la vieja Europa.
Es verdad que lo espectacular, lo novedoso, es que Chanel desfile en el Paseo del Prado para la familia de los Castro, unos cuantos amigos y otros tantos guatacas locales agradecidos y emocionados. Como es cierto que la noticia, al menos en España, sea las próximas visitas de los cantantes Julio Iglesias y Raphael y del compositor José Luis Perales, y que otros artistas se preparen para pasear con lentes oscuros por el Malecón en convertibles repintados y con carburadores de yipis rusos.
Sólo los columnistas conocedores de aquellas realidad y comprometidos con la situación de los cubanos que viven bajo el castrismo, son capaces de matizar esas informaciones con detalles como el que las decenas de ancianos que, desde el Parque Central vieron pasar las modelos de Chanel rumbo al Prado, ganan con sus pensiones el equivalente a 36 centavos de dólar al día.
Las notas sobre personajes famosos no permiten espacios para los 93 presos políticos que padecen en las prisiones de la isla. Un informe de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional confirmó que Cuba tiene hoy algunos de los presos políticos más antiguos del mundo porque un total de 21 han permanecido entre 24 y 13 años en cárceles de alta severidad.
Tampoco se halla sitio en los grandes periódicos de Europa ni para reseñar las variantes represivas que ha impuesto la policía política contra los opositores pacíficos, los periodistas independientes, los artistas rebeldes y las Damas de Blanco.
“Después de la visita de Barack Obama se ha recrudecido la violencia policial”, ha dicho Berta Soler, líder de las Damas de Blanco. “Si no estamos en la Quinta Avenida todos los domingos es porque estamos presas, pero vamos a ejercer nuestra libertad donde quiera que estemos”.
La existencia cotidiana de los cubanos de a pie y de bicicleta china no ha cambiado como no sea para ver, de vez en cuando, desde lejos, unos sets cerrados por la policía donde actúan y hacen sus musarañas personas civilizadas y famosas que viajan a una isla donde eran el enemigo y estuvieron prohibidos y ahora son huéspedes exclusivos que se retratan complacidos con quienes los prohibieron.
Raúl Rivero
El Nuevo Herald, 15 de mayo de 2016.
Foto: Las hermanas Kim y Kourtney Kardashian paseando por el Malecón de La Habana. Tomada de Noticias 24.
una robo ilucionaria
ResponderEliminarJINETERA
EN CUBA
https://youtu.be/OveqjS8BiUU
https://youtu.be/tC_PsFz-WSUMIRE
ResponderEliminarQUE BIENE
VIVEN LOS CUBANO EN CUBA
Disponible para la compra en Tienda KINDLE de AMAZON
ResponderEliminarLAS MUJERES QUE NO ERAN QUIENES DECIAN SER
autor Alejandro Marin
www.cortemoslacarajo.blogspot.com
Novela negra rioplatense.
Dos amigos, un economista de profesión y cocinero por afición y un comisario ex jefe de Delitos Complejos de la Policía Federal, tratan de desentrañar el misterio del caso que les ha caído entre manos.
La historia viaja entre Montevideo y Buenos Aires, a veces separada por el río y otras por un desigual contexto, en donde la margen occidental vive estragada por la mentira, la corrupción y la burda vindicación de la violencia. Y un decidido esfuerzo colectivo por negar la realidad de lo ocurrido, en un pasado cargado de arrebato y animosidad contra quien pensaba distinto.
El relato pinta de cuerpo entero a los personajes centrales que deambulan por los distintos ambientes, que los investigadores tienen que recorrer en la afanosa búsqueda de la verdad.
Escrito en un estilo ameno, donde no están ausentes ni el humor ni la ironía inteligente, el relato le reserva un pequeño lugar a los avatares de la economía argentina y a la descripción de sabrosas comidas, en casos con sus detalladas historias y recetas. Con la convicción que el buen comer y beber, además de un sano ejercicio para una mejor calidad de vida, también representa una plataforma desde donde aguzar el ingenio y reflexionar sobre los acontecimientos que ayudan a encontrar los secretos que uno persigue.